Cada que abre un Oxxo o un 7Eleven, tienen que cerrar 5 tiendas en la misma colonia, con las consecuencias de desempleo en la microeconomía del barrio. En Iztapalapa son 25 mil los negocios en riesgo de quebrar ante la incontenible expansión de las franquicias comerciales.
Expertos aseguran que en promedio una familia mexicana visita 276 veces al año una tienda de abarrotes. En busca de quedarse con ese segmento del mercado, las cadenas de súper mercados y empresas de franquicias lanzaron una agresiva campaña de expansión al interior de las colonias populares de la capital. Se estima que cada 8 horas se abre un nuevo Oxxo.
En Iztapalapa están en peligro de quebrar cuando menos 25 mil tiendas de abarrotes, es decir microempresas en su mayoría familiares, negocios de los que depende el abasto de insumos básicos a la mayor parte de los habitantes. El 50 % de los productos al consumidor final se distribuye en las tiendas de la colonia.
Las tiendas del barrio cumplen además una función social importante al ser el lugar en donde la comunidad se conoce y relaciona. En efecto, los también llamadas estanquillos, tienen una raíz muy profunda en el tejido social de la capital. La tienda de la esquina sigue siendo el punto de reunión, la señal para bajarse del transporte, forma parte de la identidad de la colonia.
Además las tiendas de abarrotes enfrentan una competencia incesante, no solo de las otras tiendas que hay en la colonia, también de súpermercados y de franquicias como OXXO o 7-Eleven. Esto representa una amenaza a estos negocios que son fundamentales para la sobrevivencia de muchas familias y forman un eslabón fundamental en la distribución de mercancías en el mercado interno.
Para capacitar, equipar y conectar a los dueños de las tienditas fue creada Tenoli, una empresa social que apoya a los tenderos a crecer a través de centros de atención inmersos en la comunidad. Nicolas Carayon forma parte del grupo de emprendededores que pone al alcance de los abarroteros capacitación y adiestramiento para superar con éxito la invación de las franquicias.
Según Carayon en Iztapalapa las tiendas de la esquina dependen de 8 proveedores: Bimbo, Cocacola-Femsa, Pepsico, Lala, Alpura, Nestlé, PhilipMorris y Modelo, lo que las deja con márgenes de ganancia muy bajos y una pequeña ventana de oportunidades para diversificar su oferta de productos, crecer y expandir el negocio.
Se buscan proveedores locales
La idea de Tenoli es fortalecer el mercado interno en Iztapalapa mejorando la oferta al capacitar a los dueños de los canales de distribución de mercancías, por ejemplo ampliando el grupo de empresas proveedoras y comprar colectivamente por volumen con descuento, lo que incrementa el margen de ganancia.
Nicolás Carayón, uno de los socios fundadores de Tenoli, agregó que la mayoría de las tienditas en México están excluídas de los servicios públicos y en general del sector formal de la economía, lo que tiene como consecuencia la falta de acceso a recursos que necesitan como créditos, tecnología y programas gubernamentales de fomento económico.
Según el experto las tiendas de abarrotes tienen tres necesidades básicas: Asesoría sobre como llevar sus operaciones diarias para que puedan competir con las franquicias y cadenas de súpermercados. También hay una gran necesidad de canalizar apoyos en créditos blandos, para adquirir tecnología y servicios, así como mejorar su acceso a mercados formales y ampliar su número de proveedores.
Tenoli ofrece a los tenderos asesoría para que equipen su negocio con terminales de cobro electrónico, capacitación en administración de negocios, técnicas básicas de mercadotecnia para organizar mejor su mercancía y administrar el negocio asi como conocimientos básicos de computación para manejar los inventarios de productos mediante un software básico.
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Gaceta de Iztapalapa entrevistó la señora Marisol Gudiño, quien es propietaria de la tienda de abarrotes La nueve. Escucha la entrevista completa, dale click al archvo de aquí abajo:
En Santa Cruz Meyehualco se localizan algunos de las tiendas que han recibido las asesorías de los expertos de Tenoli y las han puesto en práctica, como es “La Nueve” el negocio de Marisol Gudiño. El testimonio da cuenta del cambio posible en estas microempresas que enfrentan una competencia desleal y ávida de acaparar el mercado de las colonias populares.