Iztapalapa, 6 de marzo.- La Alcaldía Iztapalapa desazolvará mil 100 kilómetros de la red secundaria de desagüe mediante el programa Con drenaje limpio nos preparamos para las lluvias, cuyo objetivo es prevenir inundaciones, principalmente en 40 puntos críticos con mayor susceptibilidad de anegaciones, informó la alcaldesa Clara Brugada Molina al poner en marcha estos trabajos.
Clara Brugada acudió con personal de la Dirección General de Servicios Urbanos al arranque de este programa en la colonia Desarrollo Urbano Quetzalcóatl, que fue la más afectada por la inundación derivada de la lluvia del 15 de septiembre pasado y que afectó a distintas zonas de Iztapalapa, debido a que fue superada la capacidad de la red de drenaje para desalojar el agua.
Este año, la meta es limpiar el azolve en mil 100 kilómetros de red secundaria de drenaje, aproximadamente la distancia por carretera entre la Ciudad de México y el puerto de Mazatlán, Sinaloa, para lo cual se cuenta con 15 pares de malacates, los instrumentos más eficaces para esta tarea, y 10 camiones para la succión hidroneumática de los ductos. Este equipo fue adquirido en 2019 para que la Alcaldía lleve a cabo esta labor y ahorre costos.
La alcaldesa recorrió varias calles de Desarrollo Urbano Quetzalcóatl, donde el personal de la Alcaldía se distribuyó para realizar el desazolve; retiran el material que dificulta el paso de aguas residuales mediante una draga jalada con los cables del malacate. Posteriormente, el material es trasladado a un sitio de disposición final en camiones, también recién adquiridos.
Iztapalapa tiene aproximadamente 2 mil kilómetros lineales de red secundaria de drenaje, en la que se conectan todas las descargas de viviendas y establecimientos mercantiles de todo tipo y tamaño, que vierten sus desechos líquidos a la tubería para ser enviados mediante una red más amplia hasta el drenaje profundo que los saca del Valle de México.
Al respecto, Clara Brugada exhortó a la población, especialmente a los dueños de panaderías, restaurantes, cocinas y otros negocios de alimentos, así como a toda actividad donde se desechen aceites, a abstenerse de arrojar a la tubería residuos con grasa o aceite, pues cuando éste se seca se solidifica y forma tapones en el drenaje que obstaculizan el paso de las aguas residuales e influyen para provocar inundaciones.
Llamó a los vecinos a colocar trampas para grasa, de modo que éstas no lleguen a la red y generen problemas para el desagüe. También recordó que la población puede colaborar con la limpieza del drenaje si no se arroja basura en la calle, como envolturas de plástico, bolsas, botellas de pet, entre otros, que a través de las rejillas van a parar a los ductos, donde forman diques.
La alcaldesa recordó que las inundaciones no se generan sólo porque un drenaje pueda estar tapado, sino por diversos factores. En el caso de Iztapalapa, los puntos más críticos son zonas con hundimientos donde se acumula el agua de lluvia que cae en ese lugar, más la que llega de zonas altas cuando se está al pie de la sierra de Santa Catarina o de los Cerros de la Estrella y del Peñón. También por tuberías colapsadas por grietas.
Destacó que la Alcaldía Iztapalapa realiza su tarea de desazolve de forma permanente, incluso como ahora en medio de la pandemia para prevenir anegaciones. También el Sistema de Aguas de la Ciudad de México realiza importantes obras para reducir las posibilidades de inundación, entre ellas la nueva red de drenaje y un colector en Santa Martha Acatitla Sur, entregados la semana pasada.
Dijo que con los 15 pares de malacates, los 10 camiones hidroneumáticos y la labor de decenas de servidores públicos de la Alcaldía se tiene proyectado limpiar 3.5 kilómetros al día. Cada uno de los pares de malacates debe dragar por lo menos 100 metros al día y 200 metros de sondeo por cada camión hidroneumático, lo que al año dará una distancia de un millón 100 mil metros, es decir, mil 100 kilómetros.
En el caso específico de Desarrollo Urbano Quetzalcóatl, la Alcaldía construyó cinco pozos de absorción para que capten el agua de lluvia y ayuden a evitar inundaciones; además, luego de la anegación registrada el año pasado, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, visitó la zona y dispuso la realización de obras que prevenir anegaciones, por lo que se instalará un nuevo colector de mayor tamaño en la avenida Manuel Cañas.
Clara Brugada reconoció el empeño, disposición y capacidad de todos los trabajadores de la Alcaldía, que pese a la pandemia ni en 2020 ni en este año han parado en sus actividades y, por el contrario, han garantizado la prestación de servicios públicos, como en este caso el desazolve.(Boletín)