La participación ciudadana, información accesible para los ciudadanos, fortalecer la honestidad y austeridad en el quehacer público, son los ejes centrales de la iniciativa de ley del Sistema Anticorrupción de la Ciudad de México, que presentó el partido Morena en la ALDF.
Al presentar la iniciativa de Ley del Sistema Anticorrupción local, en nombre propio y del diputado Paulo César Martínez, la diputada por Iztapalapa, Aleida Alavez Ruiz explicó que este órgano debe estar enfocado en la prevención, detección, investigación, disuasión y sanción de responsabilidades administrativas y hechos de corrupción, así como en la fiscalización y control de recursos.
Además debe garantizar la protección a denunciantes, informantes, testigos y afectados por hechos de corrupción, en estricto apego a lo que establece la Constitución de la Ciudad de México.
El carácter ciudadano del Sistema se sustenta, precisó Alavez, en la propia Constitución local que establece nombramientos ciudadanos, por lo que la iniciativa del partido Morena fortalece al Comité de Participación Ciudadana del Sistema Anticorrupción local para que los ciudadanos ejerzan un control democrático de lo público.
El servicio público, dijo, enfrenta una crisis vocacional muy delicada que se refleja en la mala valoración que le otorga la ciudadanía a los partidos políticos y al trabajo realizado por las instituciones.
Alavez llamó a construir un Sistema de avanzada que garantice su autonomía de los órganos de gobierno y en el que la participación ciudadana se traduzca en un auténtico combate a la corrupción.
“Debemos construir los mecanismos que incentiven la participación de la gente y así lo proponemos en esta iniciativa”. Estamos ante la oportunidad de construir un Sistema Anticorrupción que sea ejemplo de imparcialidad y autonomía; que marque la diferencia de aquellos que se vanaglorian de haber propuesto el Sistema Nacional Anticorrupción, y pretenden coordinar los esfuerzos en esta lucha, pero “les temblaron las rodillas para actuar con firmeza en casos como la Casa Blanca, la casa de Malinalco o los contratos de Odebrecht e Higa, entre otros.
Otro eje rector de la iniciativa establece la transparencia a través de la creación de una plataforma digital accesible a todos los ciudadanos, en el que los entes que integran el Sistema Anticorrupción deberán registrar la información en formatos sencillos, no en los formatos técnicos contables con los que se hace actualmente y que poca gente entiende.