Iztapalapa, 26 de marzo.- El problema de la escasez de agua en Iztapalapa, del que estamos muy conscientes, se va a resolver en definitiva y muy pronto, ofreció el presidente Andrés Manuel López Obrador. Es muy justa la demanda de la población, y tiene razón, dijo.
A la pregunta sobre la situación que viven los habitantes de esa alcaldía por la carencia del líquido, el cual, cuando hay llega sucio, el titular del Ejecutivo federal envió un saludo a esa población, a la que recuerda e incluso menciona en su más reciente libro, ¡Gracias!, porque en 2000 López Obrador ganó la elección para la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México por la diferencia de votos a su favor que obtuvo en Iztapalapa.
De igual forma, en el tema de seguridad, planteó que se ha avanzado bastante en toda la ciudad y en aquella alcaldía, pero todavía falta más admitió. Comentó que pedirá al jefe de Gobierno, Martí Batres que nos ayude en esto.
El tema se planteó en la conferencia matutina, donde reiteró que tiene un profundo amor al pueblo porque a lo largo de su trayectoria política me ha sacado adelante; el pueblo me ha sacado a flote en los momentos difíciles.
Antes de continuar, corroboró que la autoridad electoral no lo pudiera sancionar, y luego recordó que en 2000 había, como ahora y más fuerte, una guerra sucia. Aunque López Obrador llevaba alrededor de 10 puntos porcentuales de ventaja, había la posibilidad de que si la elección se realizaba un mes después de la fecha fijada no hubiese ganado, porque tuvo una ventaja de sólo tres puntos.
Esa ventaja, afirmó, la saqué en Iztapalapa. Eso fue lo que me hizo triunfar. (Especial)