Iztapalapa, 28 de marzo.- La Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, Nashieli Ramírez, indicó que Iztapalapa es vanguardia en la capital por la forma en que se enfrenta la colisión del derecho al trabajo de los ambulantes y el derecho a la movilidad de los ciudadanos.
Al finalizar la primera sesión del taller “El Derecho a la Ciudad y el Espacio Público”, Ramírez indicó que cuando se habla del Derecho a la Ciudad o la garantía de los derechos en términos de los espacios públicos se habla de que hay procesos que implican una cesión de derechos.
“Tenemos por ejemplo cuestiones que tienen que ver con las marchas pacíficas, o los millones que vienen a ver a la Virgen de Guadalupe en diciembre. Todos estos procesos donde hay gente moviéndose tiene cierto impacto sobre el espacio público e implica la cesión de derechos”, precisó.
En las sesiones del taller participarán principalmente locatarios de mercados públicos, comerciantes de concentraciones y tianguistas, así como colonos, con el propósito de que se apropien de los conceptos de derecho a la ciudad y espacio
público, conceptos básicos para la convivencia vecinal.
La defensora de los derechos humanos de los capitalinos recordó que la Constitución de la Ciudad reconoce el derecho al trabajo informal, “tendríamos que avanzar más la Carta Magna que de hecho en sus planteamientos iniciales tenía un reconocimiento mayúsculo, más a lo que es el trabajo informal”.
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¿La Constitución de la Ciudad de México contempla el derecho las personas a un trabajo honesto como es el de los vendedores ambulantes, que se tiene que hacer en ese aspecto para garantizar su derecho a miles de personas que se ganan la vida en la vendimia cotidiana?
De entrada hay un reconocimiento al trabajo informal, tendríamos que avanzar más la Constitución que de hecho en sus planteamientos iniciales tenía un reconocimiento mayúsculo, más a lo que es el trabajo informal , se quedó con la denominación, pero dentro de esa lógica podemos ir avanzando. De entrada el principio de reconocimiento de que es un trabajo, eso es lo primero y lo otro de dignificación de este trabajo en las mismas lógicas de cualquier otro tipo de trabajo, creo que allí habríamos de avanzar y la Constitución nos abre la puerta para hacerlo.
¿En ese sentido, Nashieli como podríamos determinar dónde termina el derecho de los señores tianguistas a ponerse en la vía pública y donde comienza el derecho de las personas a poder entrar y salir de su casa?
Primero te lo voy a plantear de manera general. Cuando nosotros hablamos del Derecho a la Ciudad o la garantía de los derechos en términos de los espacios estamos hablando de que hay procesos que implican una cesión de derechos. ¿Qué queremos decir con esto? No nada más es la parte de comercio informal, tenemos por ejemplo cuestiones que tienen que ver con las marchas pacíficas, o los millones que vienen a ver a la Virgen de Guadalupe en diciembre. Todos estos procesos donde hay gente moviéndose y tiene cierto impacto sobre el espacio público. También hay conjunción de derechos por ejemplo lo que ahorita estamos hablando, la gran discusión para espacio en la vía pública para bicicleteros, para los que caminamos, los que vamos en carro, entonces como te das cuenta, la parte de construcción de derechos dentro de la ciudad no es lineal, no es yo afirmo esto y se desconoce la mitad, se construye, se construye con los acuerdos, el dialogo y la regulación.
¿Qué quiere decir esto? Si yo lo que hago es respetar la libertad de expresión o la libertad de protesta social, pero regulo este proceso para que no afecte a terceros, para que puedas avisar con tiempo, para tengas movilizaciones y hagan cortes a las vialidades, por darte un ejemplo. En el caso que estamos analizando de todo lo que tiene que ver con el comercio popular, comercio en tianguis pasa lo mismo, es decir, tenemos que respetar el trabajo y reordenar el trabajo para que no esté en colisión con los derechos de tránsito, con el que no se te pongan en tu puerta de entrada, con que la posición para el libre ejercicio de su trabajo no vaya en contra de los otros.
Hay ejemplos. tiene que ver con eso, con el tránsito, con la basura y ese es el proceso que tenemos que empezar a ver y es un proceso donde estamos acompañando en términos de mediación y formación en Derechos Humanos y resolución no violenta de conflictos y determinar qué es esto y hasta donde. No hay una fórmula.
¿Se podría extender este taller al resto de las alcaldías?
Lo vamos a hacer naturalmente en la medida que empiecen estos procesos, porque de repente ven el problema y no le entran. Aquí hay que reconocer que se ve el problema y le van a entrar. En esa lógica entonces sí, la Comisión estará presente.
Creo que lo que podamos hacer aquí con esta disposición y que podamos entrar al diálogo nosotros, en la medida de lo posible poder construir estas concepciones, Iztapalapa dará un muy buen ejemplo a la ciudad.