Tras la lamentable explosión de este martes en una casa de la colonia Santa Anita en la delegación Iztacalco en donde en primeros reportes hay 10 personas lesionadas y a fin de evitar poner en peligro la vida por riesgo de fugas o explosión la presidenta de la Comisión de Protección Civil en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), Janet Hernández Sotelo, exigió que los cilindros o tanques de gas en pésimas condiciones que se distribuyen entre la población capitalina deben sustituirse lo más pronto posible y no volver a comercializarse entre la población por parte de las gaseras.
Las fugas de gas en unidades habitacionales, casas y negocios en diversas partes de la ciudad, son una advertencia de que tanto población como empresas distribuidoras de gas deben revisar exhaustivamente los cilindros y las instalaciones por donde se distribuye el combustible doméstico, para su reparación preventiva y salvar vidas, afirmó la asambleísta.
La diputada local señaló que desde la Asamblea Legislativa insistirá ante las autoridades locales y federales, en la sustitución de estos tanques “viejos”, ya que gran parte de los mismos se encuentran en pésimas condiciones una vez que llegaron al término de su vida útil.
Hernández Sotelo dijo que tan sólo el año pasado, el Cuerpo de Bomberos tuvo que atender más de seis mil asistencias de fuga que fueron reportadas por amas de casa que no sabían qué hacer cuando se presenta la emergencia; llamando a toda la ciudadanía a contar con su Plan Familiar de Protección Civil y a aprender tanto primeros auxilios básicos como prevención de incendios.
“La población debe exigir a los distribuidores de cilindros que les entreguen en buenas condiciones los tanques portátiles, revisar que no traigan abolladuras, fallas en la salida del combustible o corrosión en los mismos, de lo contrario deben exigir a la empresa que se los sustituya de inmediato”, alertó la asambleísta.
Expresó que para evitar siniestros que arrojen víctimas que lamentar, los tanques portátiles de gas que son suministrados a los hogares en la Ciudad de México, deben ser sustituidos continuamente ante el deterioro que presentan por su uso cotidiano.
Hizo un llamado a las autoridades federales para que apliquen la Ley y garanticen el cambio de tanques en malas condiciones por parte de las empresas gaseras que los distribuyen en la CDMX. Subrayó que ya existe un programa de sustitución de cilindros portátiles, pero que éste se debe intensificar sobre todo en cilindros cuyo uso intenso los lleva al deterioro en un corto tiempo.
Cabe destacar que el mercado del gas LP en el país llega a considerarse de acuerdo a reportes empresariales en hasta 8 mil millones de dólares y su distribución en México se hace a través de cilindros portátiles, tanques estacionarios y en estaciones de gas para vehículos.
La legisladora explicó que la distribución de gas, ya sea natural o LP debe trabajar con los más altos estándares de prevención y seguridad para evitar accidentes lamentables que ya han ocurrido en la Ciudad de México. “Para no tener sucesos tan lamentables como los ocurridos en el Hospital Infantil de Cuajimalpa, en el Conjunto Habitacional Alianza Popular Revolucionaria, en la cafetería de avenida Félix Cuevas o este último en Iztacalco”, precisó.
Puntualizó que si bien no existe una cifra exacta de cuantos cilindros portátiles hay en la Ciudad, un alto porcentaje de los que se utilizan deben ser sustituidos y proporcionarles mantenimiento preventivo, destacando que la prevención salva vidas.(Boletín)