Este año tendrá 200 mil pesos cada escuela primaria pública para mejorar su infraestructura

Iztapalapa, 8 de febrero.- Con el propósito de reforzar la seguridad vial en escuelas públicas de nivel básico, a fin de evitar accidentes de tránsito en sus inmediaciones, los padres y madres de familia y maestros se coordinarán con las autoridades para responder ante una eventual emergencia, señaló la alcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada Molina, durante la entrega de kits de seguridad a comités de cien planteles de la demarcación.

La alcaldesa informó que esta acción es parte de la Estrategia de Protección Escolar Organizada que tiene como fin reducir accidentes y riesgos en las zonas escolares, cuya logística estará señalizada con elementos de tránsito, materiales audiovisuales e integrantes de los comités escolares capacitados por la alcaldía Iztapalapa.

“El objetivo es la protección de niñas, niños y jóvenes estudiantes de todas las escuelas públicas de Iztapalapa, además de organizar a los padres y madres de familia para que se capaciten y puedan responder ante cualquier eventualidad para mitigar o que no se registren incidentes, principalmente en los exteriores de las escuelas y estén en buenas condiciones y organizados en las salidas”, resaltó.

En la Utopía Meyehualco, la alcaldesa Brugada Molina, en compañía de la secretaria de Educación Pública, Leticia Ramírez, y el titular de la Autoridad Educativa Federal en la Ciudad de México, Luis Humberto Fuentes, entregaron 100 kits a escuelas públicas de la demarcación que permitirán prevenir, mitigar y responder a las emergencias en los exteriores de los planteles.

Los kits de seguridad escolar están diseñados para las necesidades de cada escuela por el número de alumnos y padres de familia, e incluyen chalecos, gorras, silbatos de emergencia, botiquines médicos, paletas de señalamientos viales con alto y siga, trafitambos para controlar el flujo vehicular en los perímetros escolares, lonas de precaución y logística para cortes viales intermitentes.

Brugada Molina señaló que la estrategia de Protección Escolar Organizada en Iztapalapa beneficiará a más de 150 mil estudiantes de los niveles básicos escolares, quienes cursan estudios en las 498 escuelas de nivel básico de la demarcación y se reforzará con distintos programas de atención social y equipamiento de los planteles. 

Refirió que con estas acciones se busca construir comunidades educativas seguras de la mano con los padres de familia y la población, porque la seguridad es trabajo de todas y todos, y dijo que como nunca antes hay coordinación entre los tres niveles de gobierno, ya que todas las autoridades han acudido a Iztapalapa para acompañar su proceso de transformación. 

Por su parte, la secretaria de Educación Pública, Leticia Ramírez, expresó su reconocimiento a la iniciativa de seguridad vial escolar que desarrolló la alcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada Molina, con lo que se concentran esfuerzos respaldados por los padres de familia, que son los primeros en participar en la seguridad de sus hijas e hijos.

“Iztapalapa es un ejemplo de trabajo, de unión, de resultados y estamos fortaleciendo la cultura de paz y seguridad escolar con acciones desde vialidad hasta temas específicos de los estudiantes, con lo que se recupera la esencia de la escuela pública y comunitaria que va a la vanguardia en temas de coyuntura”, enfatizó. 

En este sentido, la alcaldesa resaltó que este año se realizará la segunda entrega de apoyos económicos a cada escuela pública del programa “1,2,3 Con Iztapalapa manos a la obra por mi escuela”, presupuesto que asciende a 200 mil pesos para mejorar la infraestructura de cada plantel en beneficio de todos los estudiantes a fin de que tengan dignas instalaciones; además, adelantó que se van a ir desarrollando varios programas sociales para toda la comunidad educativa. 

Informó que junto con el Instituto Mexicano de la Juventud se desarrollará el programa “La paz es nuestra tarea”, donde todas las escuelas secundarias tendrán talleres educativos para lograr que desde el núcleo familiar se alcance la sana convivencia y la construcción de una conciencia de respeto entre los jóvenes y sus familiares, además de conocer la amplia gama de derechos humanos que se deben defender desde los hogares. (Boletín)