Iztapalapa, 18 de octubre.- En el pueblo originario de Santa Martha Acatitla, en Iztapalapa, se viven constantes inundaciones debido a que las tuberías de agua potable y drenaje sufrieron graves daños durante los sismos del 19 de septiembre de 2017, y hasta ahora no han sido reparadas.
En el marco de las jornadas de rescate del espacio público Ponte Guapa Iztapalapa, la alcaldesa Clara Brugada Molina acudió a Santa Martha Acatitla “porque consideramos que hay muchos lugares con afectaciones tras el sismo; por eso, hoy arranca el programa de desazolve de todas las calles, con la revisión de redes hidráulicas tanto de agua potable como drenaje, queremos ver si hay redes de drenaje rotas para empezar la sustitución, queremos recuperar lo básico, que tengamos bien las calles, iluminadas, que estén limpios nuestros espacios públicos”, señaló.
Tras escuchar señalamientos de los vecinos respecto a la escasez de agua potable, la alcaldesa reconoció que todas las colonias de Iztapalapa necesitan más agua, problema que disminuirá, dijo, con el la administración de Claudia Sheinbaum Pardo en el Gobierno de la Ciudad de México, ya que solicitó 7 mil millones de pesos para que Iztapalapa tenga más agua”. En tanto mejora el abasto, la alcaldesa anunció que se enfrentará la crisis de agua mediante la instalación de un módulo de la alcaldía en Santa Martha, para distribuir el vital líquido por medio de cuadrantes, para que llegue a todos los hogares.
Ante la queja de los vecinos respecto del Centro de Salud Dr. Maximiliano Ruiz Castañeda, que no funciona desde 2017, Brugada Molina reconoció que es muy grave que no funcione desde el sismo de ese año, pues “hubo miles de millones de pesos de apoyo para la ciudad y no llegaron a la ciudadanía; es necesario que llegue apoyo a los afectados”. Y agregó: “Si ganamos el primero de julio es porque la gente estaba harta de la corrupción”.
Además, en esta zona, indicó, se repararán 300 baches, “calle por calle arreglaremos baches y en algunos casos vamos a reencarpetar, las más urgentes”, lo más importante es que este pueblo termine “iluminado, sin baches y sin inundaciones”, afirmó.
“Nos toca sacar del abandono a Iztapalapa, porque no estaba tan abandonada, y nos toca recuperarla”, reconoció.(Boletín)