Iztapalapa, 7 de enero.- Renovar 16 mil microbuses obsoletosen los próximos seis años como plantea la Secretaría de Movilidad (Semovi) es posible, aunque requerirá de una inversión pública de entre 10 mil y 15 mil millones de pesos, estimó el presidente de Corredor Insurgentes S.A. (CISA), Jesús Padilla.
El líder empresarial y transportista con más de 30 años de experiencia en el ramo consideró que por primera vez en 18 años la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, presenta un proyecto de renovación de flota en condiciones favorables.
“No es un asunto menor, es una meta muy grande. Considerando que los procesos han sido lentos y complejos renovar poco más de dos mil 500 microbuses cada año requiere un gran esfuerzo que coordine a todos los actores. Es complicado, pero lo vemos posible. Dependerá mucho de cómo sea planteado y de la forma en que las autoridades se reúnan con los operadores de transporte”, aseguró Padilla.
Frente al escenario de cambio y con la experiencia de encabezar la transformación en avenida Insurgentes con la Línea 1 de Metrobús, el corredor de transporte público ordenado más importante de la Ciudad de México, el presidente de CISA propuso una fórmula tripartita para finalmente erradicar los miles de microbuses que aún operan.
Para Padilla son tres los factores estratégicos que permitirán consolidar la renovación del parque vehicular, apuntalar un modelo financiero sano y mejorar la calidad del servicio.
1. Durante su gestión se requerirá de una inversión de entre 10 a 15 mil millones de pesos para apalancar la adquisición de unidades, dependiendo de la configuración del vehículo y tecnología requerida.
2. Las negociaciones del Gobierno de la Ciudad de México con una banca de desarrollo y banca comercial para obtener tasas de 10 a 11%y plazos de cinco a siete años para que los transportistas paguen las unidades; así como acordar la homologación de los autobuses con las armadoras para definir los modelos más óptimos para la capital.
3. Oficio político desde la Semovi para convencer y acompañar a los líderes de los grupos del transporte para que se sumen a la modernización de la flota y un brazo técnico que trabaje todo el tema de planeación y entienda el modelo de negocio.
“En el entendido de que la jefa de Gobierno está interesada en colocar recursos al transporte para su modernización, pero también para un buen servicio; no sólo ve una flota nueva, sino un servicio de calidad. Estas variables permiten que en seis años el transporte se modernice. En este proceso el orden es fundamental”, apuntó el presidente de CISA.
-Negociación inteligente-
En este escenario, Padilla consideró necesario que el Gobierno capitalino incorpore todo tipo de herramientas de tecnología e innovación a favor de los usuarios.
Sobre este punto el presidente de CISA recordó que desde el 2002 se apoyaba a los trasportistas con un bono de chatarrización de 100 mil pesos que equivalía a 20% del enganche de la unidad.
Además de que ya no se entrega a los transportistas, ahora, este bono equivaldría tan solo a 3% o 5% dependiendo del valor de la unidad.
Padilla planteó que en un esquema ideal de renovación de tres microbuses por un autobús, es decir que 16 mil microbuses se renueven por cinco mil autobuses nuevos, el Gobierno local tendría que aportar en bonos de chatarrización entre 20% y 30% del valor de cada unidad como inyección de capital de inversión.
“Esta inversión es lo que permite el apalancamiento. El Gobierno tiene capacidad de negociar y obtener mejores condiciones, la fuerza que la doctora Sheinbaum tenga en esta negociación será primordial”, detalló el empresario y líder del transporte.
Padilla aseguró que el modelo de negocio en este proceso es fundamental para apuntalar el cambio y en este, el Gobierno también debe encontrar una fórmula para estandarizar las rutas que son rentables frente a las que tienen ingresos menores, con el objetivo de propiciar la sustentabilidad del nuevo proyecto.
Finalmente, el presidente de CISA destacó que resolver los conflictos que mantienen confrontados al sector del transporte público capitalino debe ser una tarea primordial para la Semovi, para lo cual, la administración tendrá la tarea de identificar a los actores que sean sus aliados en el proceso de modernización.