Es necesario construir una democracia paritaria, en la que el objetivo sea el empoderar a las mujeres en los espacios de representación y de gobierno; buscar una participación de todos los sectores de la sociedad en la vida política del país; y erradicar todas las formas de discriminación y violencia, coincidieron especialistas durante el encuentro “Generación de conocimiento para la construcción de una democracia paritaria”, organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en el marco del 64 aniversario del voto femenino.
El encuentro al que asistieron consejeras y consejeros, magistrados y magistradas electorales, académicos y especialistas en temas comiciales, tuvo como objetivo presentar diferentes bases de datos en torno a la participación y representación política de mujeres y hombres a nivel federal y local en México (1990-2016), así como compartir con Organismos Públicos Locales Electorales la colaboración interinstitucional entre éstos, el Instituto Nacional Electoral (INE) y el IIJ de la UNAM.
Durante la inauguración, el presidente de la Asociación de Instituciones Electorales de las Entidades Federativas (AIEEF), Mario Velázquez Miranda, consejero presidente del Instituto Electoral de la Ciudad de México, señaló que “a 64 años del voto femenino, es importante conmemorar y recordar la lucha, resistencia y trabajos realizados para la integración y empoderamiento de las mujeres en los espacios de representación y de gobierno, mejorando sustancialmente la realidad del género femenino en nuestro país”.
En el evento los expertos sostuvieron que sólo reconociéndose mujeres y hombres como personas con los mismos derechos y obligaciones, que puedan participar en la integración de órganos de decisión, es que se podrá alcanzar una democracia directa.
Agregaron que actualmente la paridad es un principio constitucional que obliga a los partidos a asignar a mujeres el 50 por ciento de las candidaturas a cargos de elección popular. Dicho principio constitucional, advirtieron, debe hacerse obligatorio en todo el territorio nacional, en el campo, en las localidades y municipios, poblaciones indígenas y en todas las entidades federativas, así como en los sectores rurales y urbanos.
Finalmente, las y los asistentes pusieron énfasis en la necesidad de realizar acciones concretas, para avanzar con paso firme hacia el camino de la igualdad entre mujeres y hombres.