Filarmónica de la Ciudad de México compartió su arte en Concierto de Primavera en la Macroplaza

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Primavera en Iztapalapa se tituló el concierto didáctico que ofreció la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM), bajo la dirección del maestro Jesús Medina, ante tres mil personas en la Macroplaza del Jardín Cuitláhuac.

La OFCM interpretó ocho piezas del reportorio más popular, para finalizar con el célebre Huapango de José Pablo Moncayo.

Jesús Medina.

Escucha la obertura de la ópera La Urraca Ladrona, de Gioachino Rossini. Dale click al archivo de aquí abajo:

En su oportunidad, la Jefa Delegacional, Dione Anguiano Flores,  agradeció al Director de la OFCM, Maestro Jesús Medina, quien se mostró asombrado por la cantidad de personas que acudieron a disfrutar de la música.

Dione Anguiano Flores y la Directora de Cultura.

“Trajimos un material variado, con obras populares de Strauss y TChaikovski, por supuesto, teníamos que cerrar con el Huapango de Moncayo y aunque en Iztapalapa la oferta de este tipo de conciertos no es común, estamos dispuestos a regresar las veces que nos lo pidan”, declaró Medina.

Escucha un segmento de  “Danza de los marineros rusos”, del ballet “La amapola roja”, de Reinhold Gliére. Dale click al archivo de aquí abajo:

Anguiano Flores enfatizó que en el mismo escenario de la macroplaza se presentaron ya la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, así como el tenor Fernando de la Mora, en el protagónico de  la ópera Payasos, con una asistencia de cinco y tres mil personas, respectivamente.

La OFCM cuenta con reconocimiento internacional a logrado en 38 años de presentaciones ininterrumpidas; la agrupación fue galardonada con el Oscar de la “Académie du Disque Francais” y calificada como la “Mejor Orquesta de América Latina”.

Violinistas de la OFCDMX

Esta no es la primera vez que la orquesta se presenta en Iztapalapa. En anteriores administraciones la Filarmónica de la Ciudad realizaba conciertos dominicales en todas las delegaciones a lo largo de su temporada de Primavera – verano y otoño invierno.

El programa incluyó “Danza eslava en do mayor, Op. 46 Núm. 1”, de Antonin Dvorak; obertura de la ópera “La urraca ladrona”, de Gioachino Rossini; la suite del ballet “El Lago de los Cisnes”, Op. 20, de Piotr Ilich Tchaicovsky, y “Danza de los marineros rusos”, del ballet “La amapola roja”, de Reinhold Gliére.

El oído es el mejor instrumento de afinación.

En la segunda parte del conciertos disfrutamos de la suite No. 1 de la ópera “Carmen”, de Georges Bizet, el vals “Emperador Op. 437”, de Johann Strauss padre, y la polka “Rayos y truenos”, de Johann Strauss hijo, para cerrar con el Huapango de José Pablo Moncayo.